La semana pasada probé la torta Exquisita mousse de chocolate, esa de la publicidad flogger, recuerdan?
El claim de la marca es que en solo unos minutos tenés una flor de torta, súper rica y canchera, sin heladera. Pero como suele suceder, el producto real difiere muchísimo de lo que nos quieren vender.
Preparación: En efecto, la preparación es muy sencilla. Mezclás los 3 sobres (el del "bizcochuelo", el del dulce de leche y el del mousse) con agua o leche o manteca (no me acuerdo porque yo no la preparé), y metés todo en la heladera por 20 minutos.
Aspecto: La torta es mucho más pequeña de lo que uno esperaría, y el tamaño se asemeja más al de un alfajor grande que al de un postre delicioso para toda la familia. En el caso de la torta mousse de chocolate, el mousse parece un vómito marrón escupido en un molde y no esa perfecta espuma beige que nos muestran en el comercial.
Textura: En palabras de mi amiga Jeju, "empezás a sospechar cuando te das cuenta de que esta gente te vende dulce de leche en polvo"; pero la cosa se pone peor. El mousse es una especie de brea densa y vaselinosa que engrasa la boca y deja una sensación desagradable que provoca la inmediata ingesta de líquido.
Sabor: No sé cómo describirlo. El "bizcochuelo" o galletita de la base carece completamente de él, mientras que el dulce de leche es solo un jarabe dulce. Pero lo peor, lo espantoso, lo imposible es el mousse, que no es dulce ni muchísimo menos, sino que es... amargo. Sí. Exquisita se las arregló para arruinar algo tan infalible como una mousse de chocolate y convertirlo en una mierda pastosa y amarga.
Si bien el precio es módico y más de uno podrá decir "por ocho pesos y pico qué querés", la verdad es que por ocho pesos me compro unas medialunas y una cindor y quedo pipona.
Calificación: 0 estrellas. Muerte.
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