1/13/2007
En un acontecimiento sin precedentes, me encuentro con dificultades para expresar lo que ocurrió anoche en el domicilio de Niño Pol.

La culpa de todo la tiene, como siempre, Capitán Intriga, quien decidió traer algo para picar y... unas cervecitas. Así comenzó una ingesta frenética de alcohol que llevó a confesiones escandalosas, bailongo con el ABBA Gold y un Niño Pol enardecido con el pibito nominado de Gran Hermano.

Los papelones del Capitán incluyeron:

- Hablar a viva voz sobre los efectos del finasteride en el conteo de espermatozoides de Niño Pol en un almacén del barrio de Belgrano en presencia de una vecina paqueta que no paraba de mirarlo escandalizada

- Arrojar las llaves por el hueco del ascensor, dejándonos encerrados hasta el día siguiente.

- Levantar el tubo de un teléfono que estaba exhibido con precio y todo en un negocio de chucherías -mientras Niño Pol vociferaba que ese era el artefacto más horrendo que había visto en su vida- y que la encargada grite horrorizada "¡NO! ¡ESE TIENE LÍNEA!"

Y la siguiente frase:

Niño Pol: "Te lavaste los dientes?"
Capitán Intriga: "Si, me hice un buche con alplax" (sic)

En fin, bajamos la pastilla para la resaca con un vodka tonic y nos fuimos a la camita. Quiero decirles que estos muchachos son dos degenerados que quisieron abusar de mí; por suerte logré huir al sillón del living, donde soñé que Niño Pol vendía drogas y manejaba el imperio del narcotráfico latinoamericano.

Esta mañana recuperamos las llaves y fuimos a almorzar al barrio chino. En el restaurant "Dragón Porteño", Niño Pol fagocitó desaforadamente los platos de todos. Luego recorrimos negocios y un supermercado chino increible donde lo que más me llamó la atención eran una especie de chorizos de goma de colores que venían en una bolsa tipo tira de salchichas y supuestamente tenían sabor a frutas. El resto de las cosas que había no sé qué eran.

Después emprendí mi larguísimo, larguísimo viaje hacia mi toldería en Quilmes city con una resaca formidable, pero regia gracias a estas dos estrellas de la blogósfera.

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